KARATECA PERUANO BRILLA EN MUNDIAL DE USA
Por Rafael Crisóstomo/ FNN News (Florida National News)
Fort Lauderdale, Florida (Julio 12, 2022).– El karateca peruano Michael Ramirez Calderón, ingeniero industrial de profesión y que ostenta el 5to Dan (Quinto Grado) en el tradicional estilo japonés Shotokan, obtuvo la medalla de Bronce al ocupar el tercer lugar en el Campeonato Mundial de la WUKF (World Union Karate Federations, por su siglas en inglés) y que reúne varios estilos de karate donde predomina el Shotokan y Shito Ryu. El mundial se realizó en el Greater Ft Lauderdale/Broward County Convention Center de la ciudad del mismo nombre en el estado de Florida.
El torneo tuvo un especial y exigente nivel de competencia en donde participaron 1,500 karatecas con predominancia europea además de la nutrida e impresionante delegación estadounidense con casi 700 atletas. Igualmente lo que puso la nota de alto nivel competitivo al torneo fueron las delegaciones europeas que se carcterizan por su gran fortaleza atlética.
Es por eso que la presea conseguida por Ramirez se hizo mucho más valiosa. Fue el único participante sudamericano y el único peruano en el torneo. Debemos además agregar que Michael participó sin contar con el apoyo –en absoluto– de la Federación Peruana de Karate y sin el apoyo de la empresa privada.
Mérito triple para un atleta que ya tiene más de siete años cosechando silenciosamente logros para el karate nacional. Llegó literalmente solo al torneo…Tremendo temple!!!
Al final de una larga jornada de varios días conversamos con Michael en una entrevista marcial donde dejó salir toda esa grata vivencia de su camino por el Karate Do peruano.
¿Cómo te inicias en el Karate Michael?
Literalmente nací haciendo karate a los 4 años en el Dojo Palace de la ciudad de Arequipa –ciudad al sur de Lima la capital del Perú– de donde soy oriundo , ele Palace es uno de los dojos (academia de karate) más antiguas de Arequipa, que era de mi padre y quedaba en un zona a denominada Miraflores, o sea, me llevaban, si o sí….(jajajajajaaja….sonríe afablemente Michael como transportándose un instante al pasado) yo iba a desde los dos años y era solo jugar pero ya a los 4 fue casi formal, aún como quien no quiere la cosa.
De allí hasta adolescente, 15 ó 16 años, donde ya el karate formaba parte de mi vida cotidiana. Obtuve cinturón negro a los nueve aunque me jalaron a la primera vez y luego a los seis meses lo volví a intentar y lo aprobé. Lo formal es 10 años de práctica en que obtienes el grado cinturón negro junior o infantil que luego lo convalidas siendo adolescente.
Termino la secundaria, y saliendo del colegio ingreso becado a la universidad sin perder el ritmo de la practica diaria. En esa parte del camino, cuando cursaba el tercer año de la carrera de Ingeniería Industrial sentía que la universidad me pesaba un tanto por la dedicación al entrenamiento y le dije a mi padre que ya no iba a seguir.
Son esos momentos cruciales, es ese minuto que la vida te da y fue cuando mi padre me dijo… “No debes la universidad porque es una gran herramienta para la vida y no se debe desaprovechar…Además lo que comienzas lo tienes que acabar” me recalcó mi padre…Sabias y contundentes palabras.
¿Nos llama la atención el tema un que hoy por hoy se habla bastante, el Karate tradicional y Karate Deportivo, cómo lo definirías dada tu trayectoria internacional?
Cuando empezé no había esa diferencia. Solo se practicaba Karate. Considero que lo que hecho toda mi vida es practicar KARATE. No existe diferencia alguna, el karate es uno solo.
Donde se puede marcar la diferencia, en todo caso si se quisiera diferenciar en algo, es que puedes competir bajo un reglamento y lo debes adaptar a tu práctica de karate en sí. Lo que realmente se practica es Karate Do para la vida misma.
¿Cómo es que te inicias en las competencias internacionales, que por cierto requieren esfuerzo no solo en la preparación de Karate, sino el aspecto económico. Sabemos el apoyo estatal es nulo y el privado requiere de factores extras?
Comienzo en la preselección nacional peruana en el 2009 pero por motivos de los estudios universitarios no podía estar en Lima que era el requisito principal para pertenecer al equipo de Kata.
No me daba el tiempo, pero me quedó sembrada esa semilla de COMPETIR, luego de varios años se presenta la oportunidad de poder competir en el extranjero.Una vez graduado, ya trabajando, tenía siempre la idea de tener un dojo y competir internacionalmente. La primera oportunidad para competir a un más o menos buen nivel fue en el 2014, participé en Brasil el Mundial abierto donde consigo ser campeón en Kata.
Luego en el 2015 vine a USA al torneo All Stars del Sensei Kubota, donde quedé tercero. Luego el Ozawa Cup en el 2016 donde logré el tercer lugar.
En el 2017 fue la última edición del AllStars también con el Sensei Kubota, conseguí el primer lugar. Luego en la WKF (World Karate Federation, por su siglas en inglés) particípo en el circuito olímpico de la Premier y la series A, en circuitos europeos. En España igualmente asisto a torneos muy enriquecedores donde ya había no solo competencia técnica sino existía el aspecto de preponderancia atlética donde la táctica la dejaban un poco de lado sobretodo los competidores europeos que eran físicamente muy fuertes.
Luego el USA Open, igualmente fui parte de la selección peruana de karate tradicional. En el Mundial de Okinawa en el 2018 donde participaron 179 competidores en mi categoría, quedé entre los 16 mejores.
Luego participé en Mundial de Karate Tradicional donde quedo en el Top 10, luego fui al Panamericano en México donde quedamos subcampeones en el 2019, subraya Michael.
Observamos que en lo últimos siete años la participación internacional de Ramirez ha sido fructífera y enriquecedora como nos deja claramente ver.
Hoy te tocó el Mundial organizado por la WUKF (World Union Karate Federations, por su siglas en inglés) donde tu participación ha sido sumamente destacada. Participaron 1,500 participantes y en tu categoría “Elite” participaron 49 competitivos karatekas, la mayoría europeos. ¿Qué te deja el el torneo?
Quedé en tercer lugar, en la categoría absoluta “Elite”, de 21 a 35 años, con 49 participantes. Casi todos Europeos, mayormente de Francia, Slovakia, Italia, Rumania, Inglaterra e incluso USA y Sudáfrica.
Fuiste el único sudamericano, –y único–, peruano con marcada desventaja logística. Todas las delegaciones llegaron con soporte total. Nutricionistas, entrenadores para el fortalecimento atlético, sicoterapistas, kinesiólogos, etcéteras. Fuiste un competidor con todo esto en desventaja. ¿Cómo lo manejaste?
La verdad que me fortaleció aún más tener estas desventajas. El representar a mi país, al karate peruano sientes una energía intensa. Minutos antes de competir me acuerdo que veía la foto de mi hijita, con tan solo meses de nacida, y era como que algo –todo en uno–, se apoderaba de mi mente. Fue una sensación tremendamente especial.
Esto me deja sin duda alguna la ambición de seguir mejorando, de retroalimentarme, de ver mi técnica nuevamente, observar que detalles mejorar, estamos perfeccionamiento contínuo porque eso es karate. Me deja con ganas revancha muy inmensa.
¿Cómo es tu día de rutina en la combinación de la practica de karate y la profesión?
Tengo un horario bien estructurado. Tengo obligaciones profesionales hasta las cuatro de la tarde y de allí doy clases de karate hasta hasta las 8 de la noche, luego al gimnasio hasta las 10 pm. Es importante mencionar que esto no se logra sin el apoyo de mi esposa, mis padres y toda la familia del karate arequipeño.
La preparación física la hago durante la semana, la parte técnica la trabajo “al tope” el fin de semana con mi padre, Mario Ramirez, Noveno Dan, quién tiene una basta experiencia tanto como practicante por haber pertenecido por muchos años a la selección peruana logrando sendas victorias para el karate nacional, incluidos los Laureles Deportivos, hoy dedicado a la enseñanza como Sensei y es igualmente Instructor jefe de la PKDA (Professional Karate Do Association) por sus siglas en inglés) reconocida a nivel internacional por la WUKF.
Lo mismo tengo apoyo del Sensei Rommel Heredia quien me permite desarrollar y corregir detalles técnicos. De la misma manera tengo a la sicóloga deportiva Rafaela Pacheco quien labora en el club profesional del futbol peruano Mariano Melgar.
La preparación de esta manera es muy “mía” si la quiero llamar de alguna forma…Franciscana.
Me gustaría, por supuesto, tener apoyo del estado o la industria privada para balancear la competencia con los europeos ya que se siente tremendamente la diferencia.
Las delegaciones que participan son de 120 o 100 personas y llegan a tope de soporte de todo orden de cosas, tres o cuatro senseis, sicólogos deportivos, etc. La verdad es que vamos muy cuesta arriba.
Un detalle que compartimos en la conversación de esa “cuesta arriba” con Michael, nos mencionas que estabas totalmente agarrotado por la intensas preparaciones y las previas a la participación…Cuéntanos…
Así mismo, por tan solo mencionar una de esas anécdotas que no faltan. Realmente estaba hecho un robot por el esfuerzo e impacto muscular dado el desgaste de llegar a la final.
Todos los competidores estaban en recuperación muscular con sus terapeutas. Yo acudo al departamento respectivo del torneo y se me ocurrió la idea de llenar una botella de plástico con agua, la puse a refrigerador para congelarla al punto hielo y luego la usé como un rodillo congelado para desinflamar piernas, hombros y brazos!!!
Me funcionó para lo que necesitaba en ese momento!!! Esos detalles te ayudan a decir voy a llegar aún entrenando como Rocky (risotadas totales!!!)
Michael tienes muy claro tu futuro en lo que a campeonatos se vienen, nos mencionas que vas a empezar al 100 en comparación a lo que has entrenado al 10, que nos dices al respecto.
Yo creo que el karate peruano merece un sitial de una buena vez por lo que hasta ahora he podido observar en mi recorrido internacional. Merece ser representado con todo. Caminamos a medias, es por eso que voy a entrenar al TOPE, es el momento de mi revancha como lo dije anteriormente.
Ese es mi objetivo, tenemos el mundial de Escocia en Julio del 2023. Los temas arbitrales van por otro camino, lo nuestro es ser contundentes en nuestra técnica para que no quepan dudas.
He visto un buen nivel. Los europeos tienen un buen legado y este torneo día mostrado esta herencia. Peo nosotros tenemos lo nuestro sin duda alguna.
En cuanto a mi participación empezé con el kata Empi que és un kata casi de familia por el legado del sensei Koichi Kawauchi al karate peruano y con el que mi padre logró llegar muy alto.
Luego continué las eliminatorias con el kata Unsu por ser unos de los mejores que he visto ejecutar al Sensei Héctor Lizano y con el que tuve un muy buen puntaje (casi igual con el campeón el italiano Antonio Soggia).
En la final, al que llegamos seis, terminé con Gojushijó Day por el Sensei Marcos Morón.
Recogiendo comentarios de espectadores o participantes, y con mucho respeto lo menciono, el tema arbitral de pronto valorizó más un salto que una solida posición de piernas, pero como dije todo eso quedó atrás, tengo que demostrar que practicando al tope nos debe salir todo lo nuestro para que no quede duda alguna en tu puntuación.
Me siento muy bien con Unsu como que es parte mía. Pero me llama mucho la atención Gojushijó Day por su complejidad en sí. Es complicado y yo soy de retos, de desafíos y para allí vamos.
El karate y los triunfos son un tema de procesos. El karate peruano tiene un gran legado de base sólida. Pero muy particularmente creo que se ha abandonado lo técnico para priorizar el factor atlético.
En cuanto a mi persona voy al revés. Trabajo el aspecto técnico muy al detalle, pero no con objetivos deportivos, para de allí solidificar el aspecto atlético.
¿Qué les puedes decir a las nuevas generaciones dada tu muy buena trayectoria internacional?
Que jamás claudiquen, que jamás se dejen vencer por las caídas. Hay muchísimas veces que las caídas son más profundas que las victorias y que el temple de un karateka se mide por eso, qué tan fuerte te caes y qué tan rápido te levantas.
El karate no es solo competencia, la competencia es una pequeña rama del camino del karate. El Karate te prepara para la vida misma, debe entenderse así.
Dejamos a Michael ya al caer la tarde rumbo a las playas de Miami, era el momento de relajarse después de un torneo mundial sumamente exigente y competitivo, como lo pudimos observar, lo dejamos en sus cavilaciones de seguir avanzado con solidez en este nuevo momento del karate mundial donde, y en eso estamos muy de acuerdo con Michael, el karate es uno solo y no hay absoluta diferencia entre lo tradicional y el deportivo.
Solo los separa un reglamento y sobre él hay que ser rigurosos, compitiendo con nuestras mejores armas mentales, con dominio total de lo que se lleva muy por dentro, forjado en un lugar –sea cual fuere físicamente–, llamado DOJO…Ossss Michael dejaste al Perú, y al karate peruano en especial, muy en alto!!! OSSSS!!!